Zodiac’s Bobber Kit Bike
Las Harley estilo «Bobber» existían antes de las Chopper, y son el origen del mundo Custom. Cuando los pilotos de la segunda guerra mundial volvían a los E.U., eran una banda salvaje, y necesitaban un poco de acción. Empezaron a retarse en carreteras que no eran realmente las adecuadas, sólo porque necesitaban la adrenalina. Para eso utilizaban las pesadas Flat y Knuckleheads. Para ir más de prisa, la desnudaban de todo lo que no era indispensable, y recortaban, es decir, ‘bobbed’ el guardabarros trasero. El Bobber había nacido. Ton Pels, Director General de Zodiac, también conocido como «El Padrino» de las competiciones drag, empezó a construir su Bobber del siglo 21, cuando S&S introducía su motor completo 93 CI de estilo Shovelhead. Este motor tiene la apariencia «Old School» pero entrega una potencia y par motor impresionantes. Como el motor había sido diseñado para un sistema eléctrico con alternador, la moto podía llevar una batería de alta potencia, y así también un motor de arranque de altas prestaciones. Los puristas podrían opinar que una Bobber de verdad se debería arrancar a patada, pero te podemos asegurar que un arranque eléctrico te hace la vida mucho más fácil.
El Bobber del siglo 21 es una combinación de apariencia Old School y prestaciones, fiabilidad y confort de hoy. Esa es también la razón porque la moto lleva una caja de cambio de 5 marchas, y frenos hidráulicos. Ton empezó la moto con una sola limitación: todos los componentes tenían que ser de Zodiac. Eso no era un gran problema, ya que Zodiac tiene unas 25.000 piezas en su gama de acesorios para Harley. Lo primero que cogió, era un chasis rígido de estilo Wishbone. Añadió una horquilla de estilo hydra de Zodiac, un depósito Flat Side, una rueda trasera de 4 1/4″ con neumático 180/60 x 16 de Avon, una transmisión TPD de 5 marchas, guardabarros de acero de Zodiac, un cuelgamonos, y un asiento Solo de Le Pera.
Para garantizar la fuerza necesitaria para el arranque, se eligió una batería Odyssey. La construcción sólo duró dos días, porque todas las piezas eran de quita y pon. Al final del segundo día, solo era questión de meter aceite y gasolina, y de apretar el arranque. S&S realizó un gran trabajo redieñando las cajas de balancines, y adaptando el árbol de levas a una puesta a punto más al estilo Evolution, funcionando bien con una compresión de 10:1. Lo que pretendía ser una prueba corta, se convirtió en una vuelta de más de una hora, con una moto totalmente sin pintar. Cuando Ton volvió al taller, tenía los ojos brillantes, y hasta, si podemos decirlo, una pequeña sonrisa, y decía, «Esta es una moto que vamos a vender como kit, tiene todo para ser un éxito. Y cuando el jefe lo dice, nosotros lo hacemos.
El kit Bobber está ya disponible. Estos kits han sido equipados de forma comprehensiva y tienen un precio muy competitivo. La pides. La construyes. La pintas. Y la conduces.